"Alquilar un piso en España es hoy un 7% más caro que hace un año"

Entrevista a Beatriz Toribio, responsable de Estudios de Fotocasa

Fotocasa pertenece al grupo Schibsted, líder en el negocio de los clasificados y presente en casi 30 países. Su objetivo es mejorar la vida de las personas y acompañarles en momentos claves de su vida, como puede ser la compraventa o alquiler de una vivienda. Su amplia y exitosa trayectoria le convierte en testigo privilegiado de la evolución del mercado inmobiliario español.

¿Qué perspectivas se auguran para el sector inmobiliario en este 2017?

Las perspectivas son buenas. En 2016 se ha confirmado que el sector vive un buen momento después de ocho años de ajuste muy duros, de parálisis absoluta. Mejoran las compraventas, la financiación, los precios se normalizan pero hay que tener en cuenta que el nivel de actividad aún es muy bajo, por eso preferimos hablar de reactivación más que de recuperación. Confiamos en que esta mejoría se extienda a más puntos en 2017, siempre que se mantenga el crédito y la mejoría del empleo.

-¿Cuál es la situación actual de los precios de venta y alquiler de viviendas? ¿Existen muchas diferencias entre unas zonas y otras?

Una de las consecuencias que ha dejado la crisis es un mercado a dos velocidades, y esto seguirá ocurriendo en 2017. Hay zonas que ya presentan una clara mejoría, pero hay otras, donde la actividad económica y comercial no es tan importante, en las que seguimos viendo números rojos. Lo que sí parece claro es que lo peor ha pasado y ya no vamos a asistir a grandes caídas de precios. Según indica el Índice Inmobiliario de Fotocasa, hemos terminado 2016 con una subida de precios en venta de vivienda de entre el 1% y el 2% de media nacional, con subidas del 2,2% en Madrid y un 6% en Barcelona, lo que refleja que los precios tienden a la normalización. En cuanto al alquiler, se está produciendo una subida generalizada de los precios en toda España. Alquilar un piso en España es hoy casi un 7% más caro que hace un año, y en zonas como Barcelona estamos asistiendo a un boom del alquiler, con un incremento de precios de casi el 14%, lo que los sitúa a niveles previos a la crisis. Consideramos que esta tendencia va a seguir en 2017, aunque el crecimiento no sea tan fuerte.

-En España cada vez se alquilan más viviendas. ¿Es por un cambio de mentalidad o se debe a que la sociedad se ha visto obligada a pasarse al alquiler por la crisis?

Un 23,5% de los españoles vive de alquiler, y aunque este mercado se ha triplicado en España como consecuencia de la crisis, podemos afirmar que el alquiler ha llegado a España para quedarse, aunque aún estamos a niveles muy inferiores respecto a países como Alemania. Estamos asistiendo a un cambio en la mentalidad de los españoles. Antes, seis de cada diez españoles pensaba que alquilar era "tirar el dinero" y hoy solo lo piensan cuatro de cada diez. También está cambiando el perfil de gente que alquila y cada vez vemos a más profesionales y familias que optan por esta opción. Un 16% de los españoles dice que preferiría vivir de alquiler y un 33% de los actuales inquilinos está cómodo con su situación.

-¿Se teme que en algún momento la burbuja inmobiliaria pueda volver a repetirse o hemos aprendido de nuestros errores?

Los españoles hemos aprendido de la crisis y veo muy difícil que se vuelva producir una burbuja inmobiliaria. Ahora, los intereses de los bancos son muy bajos, se mira mucho la solvencia del interesado y no se conceden tantos créditos. Además, no se está construyendo como antes, los precios todavía están muy lejos de los máximos de 2007, existe una fuerte presencia del alquiler y no se observa en los inversores un fin especulativo como ocurría antaño, sino una búsqueda de rentabilidad. Todos estos motivos alejan la posibilidad de que volvamos a vivir una burbuja inmobiliaria. 

-¿Qué postura, en su opinión, deberían asumir los bancos para agilizar el mercado de la compraventa de vivienda en España? ¿Y la Administración?

En la reactivación ha sido clave la vuelta de la financiación por parte de los bancos, que también están ofreciendo productos muy interesantes, como las hipotecas a tipo fijo. A nivel de la Administración, hay que sentar las bases para lograr un sector mucho más equilibrado y sostenible. Uno de los retos es dar salida a la necesidad de vivienda de los jóvenes y potenciar el mercado del alquiler, el gran olvidado en España.

-¿Cómo afecta al sector inmobiliario el gran número de extranjeros que buscan hacer de España su segundo país de residencia?

Debido a esta demanda, los grandes inversores extranjeros apostaron por el mercado español durante nuestros peores momentos. En mi opinión, va a ser una constante en el mercado inmobiliario español. 

-Algunos expertos consideran que parte del stock de vivienda nueva disponible en España es invendible. ¿Qué salida tienen estos inmuebles?

Hay mucha promoción ubicada en zonas o provincias limítrofes de las grandes ciudades donde no existen servicios ni demanda. Tienen difícil salida, ya que cada vez van a ser más obsoletas y no son atractivas para el comprador. No creo que en España asistamos a demoliciones de grandes promociones, si ocurre será algo muy puntual.

-Recientemente Fotocasa ha lanzado una campaña publicitaria bajo el lema "Foto a foto". ¿Qué importancia tienen las fotografías en la búsqueda de un particular?

La foto es esencial en la búsqueda de una vivienda y lo que atrae a posibles compradores. Cuanto más y mejores fotos tengas, más visitas consigues. A través de las imágenes podemos enamorarnos de nuestro futuro hogar. 

-¿Qué recomendaría a una persona que quiera vender su casa o que esté buscando una vivienda en estos momentos?

Si estás buscando y tienes una hipoteca de tipo variable, recomiendo hacer números y ponerte en el peor escenario posible, cuando los tipos de interés suban. Hay que ser consciente de que las grandes caídas de precios han acabado, así que, si encontramos una casa de nuestro agrado y tenemos financiación, es un buen momento para comprar. En cuanto a los vendedores, observamos una fuerte reticencia a bajar el precio de las viviendas. Hay que ser consciente de que no se puede vender a los precios de antaño.