
Xavier F. Vidal, Jefe de redacción
EDITORIAL
Estamos en un momento de intensos cambios. En el ámbito legislativo asistimos, entre otros, a la regulación del ejercicio de la profesión de Abogado, la próxima normativa sobre el Estatuto de los Trabajadores Autónomos, el Proyecto de Ley de Sociedades Profesionales, el proyecto de Ley estatal del Suelo -actualmente en tramitación-, el nuevo Proyecto de Ley de Defensa de la Competencia...
También veremos, en 2008, la aplicación del nuevo Plan General Contable, promovido con un doble objetivo: armonizar el derecho contable español con el entorno internacional y buscar que la contabilidad sea un instrumento útil para reflejar el verdadero valor de la empresa en cada momento. Por otro lado, la reforma fiscal incluirá, entre otros, las repercusiones del cambio en el Impuesto de Sociedades, sobre el que existe disparidad de opiniones entre los especialistas; algunos lo consideran positivo, otros, en cambio, creen que es un paso atrás.
En cuanto al sector financiero, cabe resaltar que 2006 fue un buen año para los mercados, siendo la apuesta sobre los activos de mayor riesgo la estrategia más remuneradora. Asimismo las empresas, y también las instituciones y entidades públicas, valoran cada vez más posibilidades de inversión, y a la postre, de financiación (bolsa, capital-riesgo, gestión especializada de patrimonios, fondos de inversión libre, entidades financieras de crédito, grandes bancos de inversión, aseguradoras, etc.), que cada día son más accesibles para los pequeños inversores y para las pequeñas y medianas empresas, por la disponibilidad de capitales dispuestos a apostar por ellas y por la creciente cultura empresarial.
También las grandes operaciones empresariales, alianzas, fusiones y adquisiciones mantienen un trasfondo financiero importante, tanto para su concreción como para su posterior evolución, que manifiestan el intenso periodo de cambios que estamos viviendo.
Con el punto de mira puesto en la competitividad empresarial, las cuestiones legales, fiscales y financieras forman un todo determinante para la empresa. En este panorama en constante cambio, las empresas se encuentran ante estos condicionantes fundamentales que hay que añadir a los de los mercados, también en continua evolución por la creciente incorporación de países emergentes o por la globalización. Los cambios de los últimos años, así como los que vendrán, en las leyes y normas mercantiles, contables y fiscales, han de ir de la mano de la realidad empresarial, y no deberían afectar negativamente -al contrario, debieran potenciar y consolidar- las estructuras de negocio. Es momento de hilar fino, tanto desde la legislación como desde la gestión empresarial, para que todos estos elementos se conjuguen en la dirección correcta y acaben situando a nuestras empresas en el camino de la mejora constante de la competitividad, que parece hemos extraviado estos últimos años. Es por ello que todos los especialistas, desde todos los sectores implicados, apuestan por que las empresas españolas consigan la máxima competitividad. Esta renovada actitud, sin duda, ha de ser muy positiva para el objetivo común de seguir creciendo.
Una vez más, y como viene haciendo desde hace cuatro años, Comunicación Empresarial publica el suplemento especial semestral Asesoramiento jurídico y financiero, que es muestra de lo que acontece y especialmente de cómo afecta o ayuda a la empresa, mediante entrevistas y artículos de los especialistas directamente implicados en estos ámbitos, que presentan las novedades, la actualidad, las oportunidades y los servicios, en los campos jurídico, fiscal y financiero.
En esta ocasión, queremos además resaltar la aportación de este medio para mostrar posibilidades factibles de acceso a la información y a las soluciones, especialmente para la pequeña empresa y los pequeños inversores, para quienes la multiplicidad de leyes y sus repercusiones quizás haya sido en el pasado un escollo demasiado grande para la gestión de información y toma de decisiones.